Según los informes, los pandilleros en Haití pueden haber quemado los cuerpos de dos de las tres personas que mataron: una joven pareja de misioneros estadounidenses y un director haitiano asociado con un grupo con sede en Oklahoma, Misiones en Haití.
Las víctimas, Davy y Natalie Lloyd y el director haitiano Jude Montis, de 45 años, fueron emboscadas por hombres armados en el recinto de la misión el jueves por la noche. Davy Lloyd, de 23 años, y Natalie Lloyd, de 21, eran misioneros de tiempo completo en Haití y estaban comprometidos a organizar la educación y los servicios religiosos para los niños.
Un video revisado por The Wall Street Journal muestra a tres víctimas tiradas en el suelo, y dos de los cuerpos parecen haber sido incendiados.
La pareja, que se mudó a Haití poco después de casarse en junio de 2022, trabajó con Misiones en Haití, un grupo fundado por los padres de Davy Lloyd en 2000. El orfanato de la misión está ubicado en Lizon, al norte de Puerto Príncipe, una zona plagada por bandas violentas.
Natalie Lloyd era hija del representante del estado de Missouri Ben Baker, quien expresó su dolor en Facebook y afirmó: "Mi corazón está roto en mil pedazos. Nunca había sentido este tipo de dolor".
El viernes, Baker escribió que la embajada de Estados Unidos en Haití había recuperado los cuerpos de su hija y su yerno, y lo describió como un alivio significativo en medio de la tragedia. También mencionó los desafíos logísticos de transportar sus cuerpos de regreso a Estados Unidos debido a la falta de instalaciones de embalsamamiento en Haití y la necesidad de encontrar una aerolínea dispuesta a encargarse del transporte.
David Lloyd, el padre de Davy, le dijo a CNN que estaba hablando por teléfono con su hijo durante el ataque. Contó cómo Davy fue arrastrado a la casa, atado y saqueado por la pandilla mientras los niños estaban en el complejo en ese momento. La llamada terminó cuando llegaron más hombres armados, lo que provocó una reacción violenta después de que uno de los pandilleros recién llegados recibiera un disparo.
